En una ciudad de la importancia y escala que tiene Caracas, es fundamental ofrecer espacios amplios y accesibles de recreación para disfrute para sus ciudadanos. También es indispensable resguardar áreas verdes para el bien ecológico y ambiental de la ciudad. Por ello la transformación de La Carlota en parque urbano ofrece una única y necesaria oportunidad de valorar, proteger y asegurar un mejor futuro social y ambiental para los caraqueños. A continuación les mostramos el proyecto de Elisa Silva, Inés Casanova y Leonardo Robleto, quienes fueron uno de los tres equipos finalistas del concurso, cuyo resultado final será en octubre de este año.
La propuesta se concentra en 3 principales gestos. La primera es entender a la ciudad como una red interconectada de espacios públicos, áreas recreativas y corredores verdes que ordenan la ciudad y garantizan una mejor movilidad peatonal. La segunda es la organización social y programática de nodos públicos en un Sistema de Parques Culturales, siendo La Carlota un primer catalizador en la conceptualización e implementación de estos territorios.
Por último es importante resaltar la conformación física de las 164 hectáreas de La Carlota con una aproximación progresiva que se va formando en el tiempo en determinadas fases. Se toma la pista de aterrizaje como elemento estructurador y vivo que evoluciona con el proyecto. A ella se suman las quebradas que atraviesan el recinto, lagos, humedales, colinas y células de actividades.
Muchos de los edificios existentes son reciclados y convertidos en programas culturales y educativos, nuevos puentes sobre la Autopista Francisco Fajardo y el Rio Guaire y una entrada desde la urbanización Los Ruices conectan el parque con la ciudad. Por ultimo se abren dos vías vehiculares y de transporte público norte-sur sin interrumpir la continuidad espacial en la superficie, para mejorar la movilidad.
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